lunes, 24 de diciembre de 2007

I HAVE TO GO

http://www.youtube.com/watch?v=p62rfWxs6a8&feature=related

...nada más que decir, por el momento.



No quiero comments. Gracias.

lunes, 17 de diciembre de 2007

ABRE LOS OJOS

Después de un viaje... el reencuentro con una persona del pasado... enfrentarme a la nueva realidad, SU nueva realidad, tan triste y desoladora como cada mañana... llena de miedos, preguntas y falsas esperanzas...

Encontrarme con él ha sido duro para mí, después de 4 años, su cuerpo parece chicle... ha perdido casi totalmente el equilibrio y ya no se mantiene en pie...

Sus músculos son como un cable que se va pelando... hasta que al final sólo quede un hilo... y cuando ese hilo se rompa...

Un final escrito en su cuerpo, y su mente intacta va asumiendo el final.

Ayudarle a morir, y no a vivir... prepararle para la muerte... ¿cómo se hace eso?

Darle afecto, ser su amiga... y no abandonarle, tener fuerza para soportar que esta enfermedad degenerativa le irá destruyendo rápida e implacablemente hasta terminar por parar su corazón... y entonces en mí quedarán los recuerdos de todo esto que hemos pasado, de este viaje, y de todos los momentos que nos quedan por pasar... porque ahora lo único que me apetece es verle y estar a su lado, apoyarle y demostrarle que la vida que le quede va a ser bonita y va a estar llena de sonrisas...

Esta es una entrada de desahogo para mí... estas son las poquísimas palabras que me salen ahora mismo... estoy desesperada, cada realidad es peor y más dura, cada experiencia más difícil... contra más me adentro en el mundo más siento su dolor... y sólo soy una pequeña humana... con un corazón petrificado en estos momentos.

lunes, 10 de diciembre de 2007

BUENOS DÍAS, PRINCESA!!!

http://www.youtube.com/watch?v=gb3AQxJ9jmk

Me despierto del sueño.
Todo es paz a mi alrededor, unas ventanas enormes me conectan con el mundo exterior. Veo la gente pasar, y un sol radiante calienta mi cara a través de los cristales.
Solo hay luz a mi alrededor.
Corro hacia tu cama y te encuentro allí, dormidito, esperándome en sueños... entonces te despierto con besitos y me entregas eso que tanto tiempo llevo esperando: UNA SONRISA!!!!!!
Tienes los ojitos pegaditos de dormir, y el pelo alborotadillo...
...entonces empezamos a cantar juntos una de esas canciones que te enseñaron tus abuelos. Las cantamos juntos, y tú me corriges porque me invento muchas de las palabras de la canción.
Nos reímos juntos mientras preparamos el desayuno. Te subes a una banquetita para llegar a la encimera.
Echas colacao en las tazas (vertiendo la mayoría del colacao fuera de las mismas), y después, despacito, coges las tazas y las dejas encima de la mesa, muy despacito, para que no se te caiga.
Yo echo la leche caliente y tú mueves la cuchara en círculos para deshacer el colacao.
Nos sentamos en la mesa y probamos cada uno nuestro desayuno... "Ummmmm" me dices mientras chupas tus morros llenos de rico colacao.
Miramos otra vez por la ventana y veo tu sonrisa cuando te fijas en otros niños con sus papás dirigiéndose al parque... yo sonrío para mis adentros y me digo... ay... si supieras lo que te espera hoy!!! hoy... vamos a ir al parque mi niño, y vamos a hacer figuritas con un palo en el barro, y después las rellenaremos con tomatitos de esos rojos que cogeremos de los arbustos...
No puedo evitarlo, me acerco a tí y te abrazo, te doy mil besos. Tú me miras con esos ojitos tan lindos y te ríes enseñándome esos dientecitos tan chiquitines y tan preciosos!!! jajaja... entonces de repente...

...aparece papá por la puerta. Le hemos despertado... trae unos pelos increíbles, los ojitos pegaos y una amplia sonrisa...

...te besa y te abraza y a mí...

... a mí me dice: "BUENOS DÍAS, PRINCESA", y no hacen falta más palabras.




sábado, 8 de diciembre de 2007

CON TANTO ESPERAR...

...y es que con tanto esperar ya no sé si realmente te estoy esperando, ni qué espero de tí.

Cuando una persona espera, es porque tiene esperanza, porque tiene fe... porque cree en la otra persona, en que llegue el día en el que por fin LLEGUE lo esperado, LLEGUE lo prometido, LLEGUEN las tejas de nuestro tejado... aquellas que encargamos hace tantos minutos... y que parece que se van callendo por el camino.

Los sueños son traicioneros, nadie les puede controlar... nadie puede elegir el tema de los sueños, aunque si todo el día hemos estado pensando en algo, es muy probable que ese ALGO se refleje después entre las sábanas.
Y el caso es que yo pienso en tí, cada minuto. Intento no repetir los errores del pasado, pero veo que voy de cabeza al mismo hoyo.
Y es que yo no sé amar de otra manera... lo entrego todo, abro mi corazón de par en par, sin miedo al frío o al excesivo calor... solos mi corazón y yo, ante la intemperie... ante el futuro, ante lo que pueda llegar.
Y resulta que tú lo tienes que cuidar, lo tienes que proteger... y no sabes cómo.
El tiempo pasa y el corazón se va encogiendo, porque no recibe lo que necesita, porque no tiene las respuestas de tí que esperaba...

Y así estamos, esperando, esperando... mi corazón y yo, PUM PUM, y va latiendo, y aveces me pregunta que qué estoy haciendo... que por qué seguimos aquí estancados, que tomemos parte en todo esto y que volemos... hacia aguas más limpias y más tranquilas.

No todo en la vida es amor... ¿ah, no? entonces que se pare el mundo, que yo me bajo...

martes, 4 de diciembre de 2007

Fresca y con buen humor, ligera y casi casi transparente.
En mis manos caben tres como ella, pero ésta es la más especial, porque es la mía.
La soplo las alitas y ella ríe, creo que le hago cosquillas.
Tiene dos antenas casi transparentes, más finitas que un alfiler, pero están siempre alerta para enterarse de todo lo que pasa en el mundo, y después cada noche me lo cuenta al oído, entre susurros.
Por las mañanas ella siempre se despierta primero, se acerca sigilosamente con su vuelo mágico hasta la punta de mi naríz y allí se posa, realizando un pequeño aleteo que termina por despertarme suavemente.
Yo la sigo hasta la cocina y entonces desayunamos juntas.
Mientras trabajo, ella cuida la casa. Después revolotea un rato por el salón hasta las dos de la tarde, que llego y me encuentro la comida preparadita.
Por las noches la cosa cambia, ella coge sus cosas y se marcha a la tetería de la esquina, donde trabaja. Entonces yo muy apenada me quedo solita, pensando en su ausencia, escuchando la música que nos gusta a las dos, dándole unas pinceladas a nuestro cuadro, buscando la manera de hacerla más feliz y apuntando todas las nuevas ideas en un cuaderno de color amarillo.
A las tres de la madrugada la oigo entrar por la ventana, suavemente, sin hacer ruido para no despertarme... pero yo la espero con ansia y una amplia sonrisa, y la rozo hasta desgastarla los polvos mágicos que tiene sobre las alas... es a las tres de la mañana cuando ella toma forma humana, sólo durante once minutos, ni uno más ni uno menos.
Son once los minutos que tenemos para amarnos, para dedicarnos los pechos y las sonrisas, los jadeos y los frotamientos, los silencios y los lametones.
Y rozo su piel con mis dedos y aún tiene restos de esa magia fugaz, de esos polvos dorados que recubren su cuerpo y me hacen ver el cielo...
Su olor es como una mañana de verano, en un despertar con la ventana abierta. Es un olor a sol, a calor, a vitalidad... tan grande que me dan ganas de gritar.
Y entonces grito, y ella grita conmigo, y somos dos mujeres en un solo corazón, y somos dos almas encontradas en esos once minutos, once minutos al día.

Y el resto del día me dedico a cuidarla y a mimarla, no vaya a ser que encuentre otra ventana abierta.

lunes, 3 de diciembre de 2007

ME MIRAS ASÍ...

Me miras así, cruzando el desierto...
Y yo que te siento tan cercano... rozando mis mejillas con tus dedos, queriendo hacerme más real de lo que soy, queriendo sentir la suavidad de la carne.
Me miraste fijamente a los ojos, destapando lo poco que me quedaba de verguenza.
Dirigiste tus manos a mis piernas, y mientras tocabas cerrabas los ojos, como queriendo recordar cada milímetro de piel explorada.
Descubriste un lunar junto a mi ombligo, sobre mi vientre, y lo rozaste con tus labios, queriendo dejar una marca perenne.
Comparaste el tamaño de mis senos con el de dos manzanas, y después guardaste esa medida en las palmas de tus manos, para sentir mi calor.
Cada minuto se hizo eterno, y la tenue luz de las velas que nos envolvía creaba un ambiente mágico entre los dos.
Tus suspiros se hicieron vitales para mí.
Cuando cerrabas los ojos de placer me hacías sonreír, porque en ese momento sentía nuestra unión, y nada podía separarnos, ese momento era sólo de los dos, sólo tuyo y mio.

Y el calor apagó el fuego de las velas, y dió paso a una dulce oscuridad, donde sólo existían las sensaciones y los susurros...
Se nos escapaban los tequieros y los besos.
El ansia por seguir era tan intenso que creíamos morir de amor. Promesas de eternidad salieron de nuestros labios, para enlazar nuestros corazones de por vida.

Y esa noche me quedé dormida sobre tu pecho, como tiene que ser.
Los latidos de tu corazón apaciguaron mi éxtasis, y tu sonrisa besó mi pelo, recorriendo mi cabecita, haciéndome sentir protegida y mimada.
Tus pies envolvieron los míos, y tu nariz se hundió en mi cuello, como queriendo recordar nuestro amor.

Y así, mi amor, nos quedamos dormidos hasta la media noche, que dió paso a un nuevo empezar, a una nueva continuación de nuestro acto de amar.

domingo, 2 de diciembre de 2007

Llorando.
Ambas se prometieron no enamorarse nunca.
Siempre serían amigas, viajarían alrededor del mundo, trabajarían en lo que fuera surgiendo.
Vivirían juntas, sin necesidad de amar.
Conocerían juntas a los hombres, y les utilizarían para sus revolcones nocturnos... pero nunca se debían de enamorar.
Un día, la morena se enamoró. Estaba comprando manzanas (de las amarillas) cuando alguien rozó su espalda. Entonces al darse la vuelta vió a la persona más linda que jamás había visto. Sus ojos eran grandes, y sus labios gruesos. De espaldas anchas y grandes piernas. Sonrisa que invitaba a otra sonrisa, y así lo hizo ella...
Ese cruce de sonrisas fue suficiente para empezar.
Después vinieron las palabras, los paseos, las cenas, el sexo, las risas, la complicidad, la confianza... el secreto.
Pero la rubia no era tan tonta, y enseguida se dió cuenta de que su alma gemela había roto la promesa que se hicieron años atrás. Hizo su maleta y se fue de allí, abandonando para siempre a su amiga, sin despedirse.

Cuando la morena se dio cuenta de la ausencia de su alma gemela, una amplia sonrisa cubrió su rostro. Sintió que un gran peso se le quitaba de encima... hacía meses que quería romper esa estúpida promesa, sin herir a su compañera... pero no sabía cómo...

Una enamorada por siempre.

La otra viajando, soñando, visitando... sola con su espera, sola con su iniciativa, sola con la ilusión de encontrar la cima de la felicidad sin necesidad de amar... pero las noches son frías y el corazón de esta pequeña mujer cada vez más pequeño.
Ausencia... tristeza... se sienta abrazada a sus rodillas y ya no siente su corazón... sola, sola, SOLA.



Desde lo alto, un ser sobrenatural las vigila. Las inventó un día moldeando su plastilina, y ahora las tiene ahí, a una amando por amor, a otra sufriendo por su ausencia. Y cuántas risas y llantos le han proporcionado... sin estas mujeres, la vida sería aburridísima, pensaba el ser.