lunes, 8 de octubre de 2007

CHIQUININA

Empieza a sonar un violín.
http://www.youtube.com/watch?v=I0tMmsUEGOY
Ella tiene un corazón chiquinino, en proporción armoniosa con su cuerpecito pequeño y fino.
Tostada por el sol, pelo largo y brillante, sonrisa radiante y ojos grandes y elocuentes.

Su corazoncito está herido, ha pasado ya mucho tiempo.
Quiso hasta la saciedad a un hombre, y éste al final dejó de ver el amor entre ambos...
Después del abandono no podía ser feliz. Deambulaba, salía, recordaba... pero siempre con ese hombre de ojos claros en la mente... que borraba su sonrisa.
Podía verla triste, con la mirada perdida, en otro mundo... con él.
Ahora ha conocido a un hombre. Uno de verdad.
Uno que tiene una sonrisa especial, que hace que los días se vuelvan amenos y pasen felices y llenos de paz.
Uno que regala sonrisas sin preguntar, que respeta y ofrece sus manos abiertas...

Aristóteles fue el maestro de Alejandro Magno. Dicen que cuando Alejandro murió, quiso que le llevaran con el ataúd abierto y las manos por fuera, con las manos extendidas y las palmas mirando hacia el cielo. Quiso que se le pasease así por toda la ciudad, para que el pueblo viera que aun habiendo sido rey no se llevaba nada a su tumba, se iba con las manos vacías...

...y así... ¿cuál es el sentido de la vida? vivimos movidos por nuestros ideales, por nuestra escala de valores, siguiendo unos pensamientos y una forma de ser y de estar labrada con el tiempo y las vivencias de cada uno...

...pero al final todo es nada, y TODO.
Al final queda un cuerpo inerte con las manos vacías, un alma vagando entre los vivos y una obra realizada en vida que dejará más o menos huella en la existencia de nuestra descendencia...
...y todo el amor que hemos profesado será nuestra obra más preciada... y por eso seremos recordados y admirados con devoción...

...porque las sonrisas no se olvidan... y el amor no se debe abandonar...

Cuando encontramos una persona que brilla bajo el sol, que nos sonríe y nos da todo lo que nos hace felices no tenemos que dejarlo escapar, ni estancarnos en el pasado.
Tenemos que ser fuertes y soñar, y volver a ilusionarnos con un "es posible"... con un quiero y un puedo...

...y al final esas manos que parecen vacías estarán llenas de amor, ternura y vivencias...

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